lunes, 29 de abril de 2024

Estudios Pertegás

 Nota: Si lo vas a leer desde un móvil, en horizontal. 


Todo comenzó por culpa de este Roselson Garratt "Stereominor" que mi padre compró allá por los años 60. De bien pequeño me sentaba en el suelo, con la espalda pegada al mueble y escuchaba fascinado como salía por el lado izquierdo una trompeta, unas maracas por el derecho o más alucinante aún, unos arpegios de piano que pasaban de derecha a izquierda o un bajo que se quedaba en el centro y en el centro no había ningún altavoz, todo eran interrogantes que se despejaron por sí solos cuando años más tarde maneje por primera vez una mesa de mezclas.

Estudios de Grabación Pertegás


Un equipo de música por sí solo no es más que un mueble y los discos con los que empecé a educar mi oído no pudieron ser mejores, este de aquí debajo fue el que más me impresionó, me lo sabía de memoria, no solo las melodías, sino lo que hacía cada instrumento y como estos estaban repartidos en el estéreo. 



Lo más por aquellos tiempos eran los discos en 4 fases, dejo un enlace para el que tenga curiosidad en saber como se grababan.


Y para el que quiera escuchar lo mismo que me cautivo a mí con apenas diez años, aquí dejo alguna muestra, hay que entender que eso fue en los 60 y el sonido ha mejorado notablemente, pero se echa de menos esa frescura y naturalidad que en la música de hoy en día es difícil de encontrar. 
Para escuchar con auriculares.





Mejores maestros no pude tener, Dvorak, Beethoven, Glend Miller, Sinatra, etc. Mis oídos se acostumbraron a lo mejor y a toda clase de música.
 


Mis padres estaban suscritos al Círculo de Lectores, una publicación a la que te abonabas y tenías muy buenos precios para la compra de libros, gracias a ello, con apenas doce años ya me gustaba leer, recuerdo especial para "Lo que el viento se llevó". En un momento dado, en la revista trimestral que recibíamos apareció una nueva sección de discos y ¡tocadiscos de maleta!, la oportunidad de poder tener mi tocadiscos y en mi propia habitación, dejé de comprar libros y todos los puntos que me correspondían trimestralmente los fui ahorrando y en un par de años pude pedírmelo, además coincidió con el comienzo de los "Guateques", bailes que celebrábamos la pandilla de amigas y amigos en nuestras casas particulares, no en todas, ya que algunos padres no les dejaban. La moralidad de la época era muy estricta, la verdad es que en mi casa y por parte de mi madre era extrema, pero por algún motivo que se me escapa me dejaban organizar bailes en mi habitación, imagino que preferían tenerme en casa, que por ahí fuera de su control. 


Este tocadiscos me permitía separar los altavoces hasta el límite de sus cables y el efecto del estéreo se potenciaba, buscaba ubicaciones nuevas constantemente, en lo alto de los armarios, bajo de la cama, colgados en la pared, el sonido no era el mismo, o bien perdía agudos o bien ganaba graves, a mí me gustaba ganar graves, ya que esas cajas abiertas por detrás no los daban, ignoraba los motivos, pero siempre andaba buscando el mejor sonido posible. En los guateques solía ser yo el que ponía los discos, pues tenía una habilidad especial para dejar caer la aguja en el surco en blanco.

 
Pasaron un par de años más y en Valencia empezaron a aparecer las primeras tiendas de "Alta-Fidelidad"  había una muy cerca de mi casa, se llamaba Líder y su dueño era Salvador Vernich, ahora pienso en la lata que le debí de dar, aunque al final me convertí en un excelente cliente y terminamos por ser amigos. Salvador tenía lo mejor de lo mejor, pero los precios eran totalmente inalcanzables para mí, con apenas 17 años mis únicos trabajos eran de temporada, juguetes en Navidad, garito de playa en verano, dependiente en rebajas, etc. Hasta que uno de esos días que estaba dando la lata en la tienda de Salvador, este me propuso que le montara unas cajas acústicas que le venían de Alemania en kit, acepte sin dudarlo, pero … "¿Cómo las voy a probar si no tengo un amplificador y un plato? No te preocupes, por ahí tendré algo que te pueda prestar". ¡Uau! De repente tenía una etapa de potencia Vieta, no era de lo mejor, pero buenooooo ¡Y un plato Thorens! Ese sí que era de primera, además me quede con el primer kit de altavoces que monte. 
En alguna publicación francesa de sonido había leído que la fibra de vidrio iba bien para mejorar el sonido de los graves y rellene con ella los altavoces de mi tocadiscos y efectivamente mejoraba el grave. Por mi cuenta y riesgo, forre el primer kit por su interior con fibra de vidrio, cuando lo lleve a la tienda lo conectamos al "Comparator", que servía para comparar equipos solamente pulsando un interruptor, y comparamos con un kit sin fibra de vidrio, la diferencia fue enorme, un grave redondo y más profundo los distinguió enseguida, como el precio de esas cajas acústicas era muy bueno, Salvador vendió muchas y obviamente quedó muy contento con mi trabajo, aproveche para pedirle que me vendiera un magnetofón Revox A-77 a plazos, lo mejor que había en la época (60.000 pesetas) un sueño para cualquier músico. Con lo que ganaba montando kits no me daba para pagar las letras, pero confiaba con lo que podría ganar haciendo grabaciones. Alguna letra de cambio no pude pagar a tiempo y el amigo Salvador me las volvió a girar. El sueño empezaba a hacerse realidad.



Amplificador Vieta y plato Thorens TD 166

Ya tenía un magnetofón profesional y un buen equipo para escuchar las grabaciones, faltaba un sitio donde realizarlas, como no disponía de más medios económicos de momento sería mi habitación en casa de mis padres. Era complicado, silencio en la casa absoluto, rezar para que nuestro perrito Tedy no se pusiera a ladrar, etc. En esas condiciones grabe una maqueta a Lluís Miquel y los cuatro Zetas y otra a un joven cantante que más tarde sería conocido como Francisco, al cual empecé dándole clases particulares de guitarra, además tenía más alumnos lo cual me ayudaba a ir pagando el magnetofón. Por supuesto yo me pasaba el día grabándome y haciendo mil pruebas, distancia al micro, ángulo, niveles de entrada, grabación pista sobre pista, etc. 


Estudio en mi primera casa, ya independizado, aún estaba haciendo la mili, contaba con otro Revox más, el hermano mayor del A-77, un A-700.

En este momento del relato hay que recapitular un poco, yo había empezado a tocar de oído la guitarra, enseguida que pude me matricule en el conservatorio, todo fueron matrículas de honor (Yo que en bachiller siempre lo suspendía todo) y en primero ya tocaba obras de fin de grado, pero ni el solfeo ni la enseñanza tal como estaba concebida en aquellos tiempos estaban hechos para mí, así que mi paso por el conservatorio fue breve, no así la relación con algunos profesores, ya que les grabe conciertos desplazando mi Revoz A-77 a la sala de audiciones del conservatorio.
También tocaba con un par de amigos que formaban el Dúo Humo, tristemente conocido porque iban con Nino Bravo camino de Madrid cuando este se mató en un accidente de automóvil. El accidente dio al traste con el disco que iban a grabar, que aunque salió al mercado, al no estar Nino paso sin pena ni gloria. El Dúo, un servidor y un cuarto miembro, que por entonces tocaba el bajo con el cantante Bruno Lomas,  formamos el Grupo Humo. Eran los últimos años de la dictadura y nos dedicamos a hacer lo que se llamaba "Canción protesta" pero con una formación típica de rock, esta es otra historia que durante un tiempo camino paralelamente al estudio de grabación, si tienes interés la puedes ver aquí:
Estaba metido en el mundillo artístico, sobre todo el musical, que hacía oposición a la dictadura y yo era el único que tenía un equipo profesional de grabación, empecé haciendo nuestras propias maquetas, las de Humo, en nuestro local de ensayo. 


Arriba: En un cartel anunciador de nuestros conciertos se me puede ver manejando un Revox A.77.


Arriba: estos eran los equipos que teníamos en Humo para las actuaciones en directo, etapa de potencia y previo mezclador de seis canales, con el previo de seis canales conectado al magnetofón hacía una primera toma en estéreo con la base musical, sin la voz o voces,  y luego sobre grabando ese estéreo grabábamos la voz, el Revox tenía esa posibilidad, si bien había que acertar con el volumen de la base musical y el de la voz porque ese resultado ya no se podía variar, una vez tenías la base musical y la voz podías volver a sobre grabar otra cosa, por ejemplo un solo de guitarra, a esto se le llamaba grabar pista sobre pista, pero más allá de dos grabaciones se ensuciaba mucho el sonido y sobre todo se iba acumulando el ruido de fondo de la cinta, el llamado y odiado "siseo"  


Arriba: algunas de las revistas que procuraba no perderme, la francesa no la he encontrado, pero gracias a saber francés era la que más entendía, aunque el lenguaje técnico en inglés me era familiar.

Debajo: En el local de ensayo de Humo con mi amigo "El Pera", hicimos algunas composiciones de música solo para guitarra, tendría que animarme y grabarlas, antes de que se borren definitivamente de mi memoria. En la foto se puede ver el A-700 y el equipo de voces de Humo, un eco Binson Echoret dos y el previo de seis canales que fue el equipo antecesor la las mesas de mezcla. 


Para el que no lo conozca, esto se hacía con el Binson, las reverberaciones más modernas lo dejaron obsoleto.


Fue un no parar, todo el mundo quería grabar, bien para vender copias de casete en sus conciertos, bien para hacer maquetas con cierta calidad para poder llevarlas a las emisoras de radio, compañías discográficas etc. Grabábamos en bajos, locales de ensayo y casas particulares, se hacía necesario un sitio con unas condiciones acústicas mínimas y cierta tranquilidad. Al mismo tiempo que tocaba en Humo y hacia grabaciones se me empezó a solicitar como técnico de sonido para otros grupos, a destacar entre ellos a "Els Pavesos" de Joan Monleón y Lluis Miquel y Els 4 Z, con los que hice muchas actuaciones. También sonoricé algún festival, aquí llamado aplec.



Disco de Els Pavesos "A la nostra gent" la portada era un homenaje al disco blanco de los Beatles. La música eran canciones populares valencianas. Los técnicos éramos un servidor y Quique Morales que más tarde me sustituyo, yo ya no daba para todo y prefería dedicarme de lleno a mi estudio.

Una colaboración que merece un apartado especial, fue la que tuve como técnico de sonido con Toni Pep Rodríguez, músico y fundador de "La Taba" una promotora que gestionaba actuaciones y producía discos, entre ellos produjo el nuestro, el de Humo, junto a Gonzalo García Pelayo. También tenía una tienda de discos de importación llamada "El L.P. Varato" y digo bien: varato, en ella hicimos la mayoría de las grabaciones, algunas de las cuales me cobre con discos. Recuerdo a cantantes y grupos como: Lluis el Sifoner, Ximo, Pere y Cia, Benavente, Cuixa etc.

Aquí dejo esta entrevista relativamente reciente por si alguien quiere saber más sobre Toni Pep


Arriba: Toni Pep, un músico avanzado para su tiempo y su lugar.

Debajo: dos componentes del grupo Cuixa: Toni y Quique, que también formaron el dúo del mismo nombre y que compartieron actuaciones con Humo, el del bajo es Quique Morales, que trabajo conmigo como técnico, con Joan Monleon y Els Pavesos y que más tarde entraría a formar parte de los Estudios  Pertegás y que continuaría hasta su cierre.   



Por si esto no fuera poco, me salió un trabajo como técnico de sonido en una conocida sala de audiciones de Valencia, la sala Gent, que ofrecía actuaciones en directo a diario, audiciones de música clásica y proyecciones de cine en 16 milímetros. Entré en la sala de la mano de Joan Monleón que conocía al propietario, Pep Laguarda, un empresario valenciano al que se le consideraba como un mecenas de la cultura valenciana y del que guardo un gran recuerdo, generoso y amable en el trato y que siempre me dejo libertad total para llevar la sala, incluso me permitía hacer grabaciones fuera de horas de trabajo, el horario era de seis de la tarde hasta las dos de la madrugada aproximadamente, tenía las mañanas y casi media tarde libres, allí hice muchas grabaciones, sobre todo de los grupos que actuaban y todas las noches sin excepción se grababan en directo las actuaciones. En Gent estaba el mejor equipo de sonido posible en aquellos años, otro sueño para cualquier técnico, estaba a cargo de  un afamado técnico inglés que fue quien además vendió e instalo todo aquello, creo recordar que se llamaba Larry, supongo que cobraría un buen sueldo, pero parece ser que quería cobrar mucho más y ese fue el motivo de mi entrada en la empresa, el traspaso de cargo no fue muy agradable ni el tal Larry me lo facilito mucho. A mí me pagaban bien y no podía tener un trabajo mejor, me dejaba mucho tiempo libre para mis otras actividades y además tenía un sueldo fijo, no podía pedir más, muchos nervios los primeros días, hasta que me hice con ello.
Entre otros muchos grupos y artistas, ahí empezó su carrera el músico y humorista Moncho Borrajo, durante muchos meses ocupó la noche de los sábados con llenos absolutos. 


Cartel anunciador en prensa de una de las programaciones semanales de la sala Gent


Arriba: También teníamos nuestras propias cintas, todos los que actuaban tenían una copia de su actuación.

Debajo: Un servidor en el centro de control, casualmente detrás de mí se ve el disco de West Side Story ¿?



Debajo: También nos permitimos alguna actuación. En el escenario de Gent con Fernando de Humo.



Debajo: otra de las actuaciones en Gent, en el centro de la fotografía Jorge Juan Villaverde, bajista de Humo y buen amigo, también estaría de técnico en Pertegás y más adelante pasaría a formar parte del primer plantel de técnicos de sonido en la naciente TV valenciana Canal 9, la cara a su izquierda es de Herminio, buen guitarrista que también colaboro con Humo, ambos ya no están con nosotros.




Estudio multipista en un piso a las afueras de Valencia
Año 1976

Ya podía alquilarme un piso, aunque no daba para tener teléfono, el que figuraba en la tarjeta de visita era el de casa de mis padres. Tenía solo dos habitaciones y empleé la más grande para hacer el control y que al mismo tiempo me sirviera de dormitorio y a la que enfrentaba con ella le hice una ventana, la aislé lo mejor que mejor pude y quedo convertida en el cuarto de silencio. Mi mayor preocupación eran las molestias que pudiera ocasionar a los vecinos y que podían dar al traste con el estudio si me denunciaban, pero estos estaban encantados en ver de vez en cuando a algún grupo o cantante conocido, el mayor obstáculo estaba superado.
 El cuarto de silencio era pequeño y cuando venía un grupo lo tenía que repartir por toda la casa, en el cuarto de silencio la batería, la guitarra acústica al baño, que además le daba un sonido brillante y natural, el teclado y el bajo en mi cuarto conectados directamente a la mesa de mezclas, la voz o voces se ponían después, ya que empecé con un Teac de cuatro pistas. Tenía como máster un Revox A-700 y un Revox A-77 para copias, además contaba con una buena reverberación y un ecualizador gráfico.



Estudios de Grabación Pertegás

Mi cama estaba justo enfrente del control, de día se usaba como sofá. 





Folleto publicitario que me hacia yo mismo de uno en uno, para dejar en agencias e instituciones. Fotos en papel pegadas de una en una y texto con Letraset ¡Que paciencia!



Las gestiones empezaron a dar fruto y grabé a la Orquesta Sinfónica Municipal de Valencia en el teatro Principal la Novena Sinfonía de Beethoven, fue todo un reto, una orquesta sinfónica tiene un rango dinámico amplísimo, puede ir desde los veinte decibelios hasta los ciento diez, esto sin tener compresores limitadores era muy complicado de grabar, pues el propio ruido de fondo de la cinta se comía los pianísimos y un pasaje fuerte saturaría la señal y distorsionaría el sonido. Escuché la obra más de una docena de veces hasta tener claro dónde debía actuar bajando a mano la señal de entrada, sin brusquedades para no afectar demasiado a la dinámica de la obra. Empleé un sistema binaural, lo había leído tiempo atrás en revistas de sonido francesas e inglesas, consistía en dos micrófonos omnidireccionales situados en una cabeza artificial y colocado en el lugar donde se sitúa el director de la orquesta, si la orquesta está bien equilibrada, o sea que si tiene el número necesario de músicos de cada instrumento el sistema lo recogerá tal cual y el resultado será bueno, si no está equilibrada luego no hay posibilidades de mezclar nada. En esos tiempos tampoco había nada mejor si no se traía un estudio móvil desde Madrid y eso también estaba fuera del alcance de la mayoría de instituciones. 


Arriba; mi equipo móvil, mi moto, ahí cargaba el Revox, los pies de micro, cables, cintas, etc. En la foto con mi hermano Edu.



Yo no tenía el sistema binaural como tal, pero poniendo los dos micrófonos omnidireccionales en un mismo pie de micro abiertos a 45º y con un panel de espuma como separación en el centro se consigue un efecto muy parecido, lo más importante es que la sala tenga una buena acústica y que la orquesta esté equilibrada, dos buenos micrófonos de condensador conectados directamente al magnetofón dan una señal limpia y muy real.  

También hice muchos trabajos de sonorización de mítines y cuñas para radio de diversos partidos políticos de cara a las primeras elecciones de 1977.

Las visitas a las agencias de publicidad también dieron sus frutos, sin embargo, mi primer trabajo no fue grabar un "Jingle" o una "cuña" consistió en acompañar al gerente de la agencia a Alicante para la presentación de la campaña que había creado para los chicles "Cheiw Gum" yo solo tenía que llevar mi equipo de Hi-Fi con un Revox para poder escuchar la cinta que venía directamente de un estudio de Madrid, fue una bonita experiencia, hotel de lujo, con un bungalow individual apara cada uno, comilona y éxito total para la empresa pues le compraron la campaña.


El primer "Jingle" me lo encargó una agencia de publicidad cuyo director era cliente/amigo de mi padre y se trataba de hacer una canción para la casa Rubigan que fabricaba pesticidas, fungicidas, etc. Fernando compuso la música y el jingle fue aceptada por la agencia y por la Rubigan.
 
El estudio no paraba nunca, cuando me quedaba solo me ponía a hacer las copias a casete de las grabaciones efectuadas, en algunos casos, cuando se trataba de grupos que actuaban en pubs y salas de fiesta podían ser cincuenta o cien copias, que yo tenía que hacer de una en una y a velocidad original, si una grabación duraba treinta minutos, la copia tardaba treinta minutos en hacerse, tenía dos magnetofones a casete lo cual me permitía hacer el doble, pero aun así no era suficiente, había que buscar otra solución.   
De nuevo otra vez un amigo de mi padre que tenía un bajo en el que rellenaba cintas vírgenes de casete a medida, no las grababa, pero al menos gastaría mucho menos en cintas, hasta el momento las compraba en los comercios corrientes a p.v.p y generalmente desperdiciaba buena parte de la cinta, pues a veces la copias eran de una canción, apenas tres minutos y la cinta duraba una hora. 

También hice trabajos varios, como una banda sonara para una obra de teatro que me obligo a crear efectos especiales, como pasos, puerta que se cierra, el sonido de una llama (Que se hace arrugando un papel de celofán) etc. que luego había que ir intercalando junto con la música en la cinta que servía de fondo a toda la obra. También grabe una especie de "Ópera Rock" para la Falla de Na Jordana de Valencia, la música la compusimos Fernando y yo y se estrenó en el teatro Talia de Valencia.


Este estudio empezó con un magnetofón de cuatro pistas y terminó con uno de ocho pistas, un Teac Tascam 80-8. Por aquel entonces ya empezaba a estar un poco cansado y tomaba fuerza de nuevo mi otro gran sueño, tener un velero y dejarlo todo, cosa esta bastante complicada en ese momento, pues ya tenía familia, compromisos, deudas, etc. Pero la llama ya estaba prendida, me costaba lo mismo el magnetofón que el velero, me decante por seguir el sendero por el cual todos circulamos, al menos de momento. En las fotos de arriba el magnetofón y el velero, ambos costaban lo mismo, 850.000 pesetas

         
  ESTUDIOS DE GRABACIÓN PERTEGÁS S.A

El amigo de mi padre, el que me rellenaba las cintas de casete, también tenía un estudio, o algo parecido, en el bajo donde fabricaba las cintas había una sola empleada que era su amante, y el estudio parecía más lo que entonces se llamaba "Un picadero" poca luz, colores rojos y negros, candelabros color oro, mesas de piedra, un horror, pero estaba insonorizado, había un cuarto de silencio y otro de control.

Hicimos una sociedad entre Fernando (Humo) Quique Morales (Que hacía algún tiempo ya colaboraba conmigo) y por un módico traspaso nos quedamos con el local. Lo tiramos todo abajo excepto la sala de silencio que estaba muy bien insonorizada con toneladas de arena de playa, derribar la mesa de piedra del despacho nos llevó trabajo, pero nos lo pasamos bien rehaciéndolo todo de nuevo.

Empezamos con el equipo que yo tenía, aunque enseguida cambiamos la mesa de mezclas, pues la mía  era solo doce canales y eso era claramente insuficiente, seguimos con la misma marca, Allen & Heath, añadimos un compresor limitador y una reverberación de más calidad. Trabajo tuvimos desde el primer día y justo rematé las gestiones que inicié con anterioridad con la Sociedad de bandas de música de Valencia y nos llevamos la exclusiva para grabar el certamen de bandas que todos los años se celebra durante la Feria de Julio de Valencia, eso significaba cientos de copias en casete para las bandas que concursaban. Me fui a vivir a Xirivella, justo encima del estudio, para minimizar los posibles problemas con los vecinos, lo que no calibre bien es que el molestado sería yo.

No recuerdo exactamente cuando, pero el magnetofón de 16 pistas no tardo mucho en llegar, fue un Lirec de 16 pistas de segunda mano.

Se puede decir que pasaron todos los grupos de rock que salieron por aquellos años, los años de "La movida valenciana"  también orquestas de baile y solistas mil, tampoco falto la publicidad, hicimos muchos "Jingles" teníamos la gran ventaja de ser también músicos y aparte de que los componíamos nosotros, la mayor parte Fernando, para hacer las maquetas de presentación a la agencia también  tocábamos nosotros, esto nos permitía incluso presentar varias versiones, ya que nuestro coste era solo el tiempo empleado.
 
Estudios de Grabación Pertegás

Buscando información por internet encontré esta página, no se les ha escapado casi nadie 
¡Estamos hasta nosotros!

Este vídeo resumen lo hizo recientemente Vicente García, que entró de segundo técnico en la sala Gent,  lo encontré en internet de casualidad.


Unas cuantas fotos de Estudios Pertegás S.A: 

Estudios de Grabación Pertegás










Muchos grupos fueron muy conocidos, como por ejemplo Presuntos Implicados, Seguridad Social, Revolver o Video, hubo otros que no llegaron al gran público, como Los Auténticos y Girasoules, pero que al menos para mí, no desmerecían en absoluto a los que triunfaron.

Aquí algunos de los grupos que grabaron con nosotros y que he podido recuperar a través de Internet




Presuntos Implicados


Betty Troup y Mama Ya Lo Sabe


Platino, a la batería mi hermano Edu


Video, ya les grababa maquetas antes de tener el estudio de Xirivella, se llamaban Albatros y tocaron varias veces en Gent, buena gente y buenos músicos. La cantante, Pepa Villalba, falleció en el 2017.


Revolver y Seguridad Social


Rock'N'Bordes y Farmacia de Guardia


Armas Blancas y Los Inhumanos


Ximo Tebar y Girasoules, por cierto, vueltos a escuchar ¡Qué pop tan fresco y bueno el de Girasoules!


Betty & Dukes


Comité Cisne y tantos otros ...

Debajo; algunas de las orquestas, eran tiempos en que se llevaban las grandes orquestas, ahora prácticamente han desaparecido, su lugar lo ha ocupado un solo músico con un ordenador y un teclado. 






Y muchos cantantes solistas, de los primeros, si no el primero, Yaco Lara.








Debajo: edición para la Caja de ahorros de Sagunto del concierto de Aranjuez, del maestro J. Rodrigo, que era natural de Sagunto, quizás la única grabación que exista en el mundo en que toda la orquesta está hecha con un sintetizador, enorme trabajo del pianista Fabio Miano, el Guitarrista Enrique Perona (Amigo y profesor mío)  y de Quique Morales como ingeniero de grabación.





Xirivella Records

Terminamos por crear un sello discográfico, tenía poco sentido seguir pagando a otra compañía para que legalizasen nuestras producciones, le llamamos "Xirivella Records" 
Alquilamos otro bajo en la misma calle y domiciliamos en el mismo la compañía, aprovechamos que teníamos espacio y montamos una planta de duplicación de cintas a casete, nuestro amigo seguía suministrándonos las cintas y las grabábamos y legalizábamos nosotros mismos, una imprenta de Xirivella nos hacía las carátulas. Autonomía completa.  



En este enlace hay recogidas 137 producciones nuestras.




Arriba: Duplicadora de cintas a casete, ponías una cinta máster, la roja, y en el caso de la foto te duplicaban al doble de su velocidad normal nueve cintas, podías añadir más módulos de cuatro cintas y aumentabas la producción.

También teníamos un equipo móvil de ocho pistas, al cual le hicimos muchos kilómetros por toda España, la mayor parte de ellos grabando música popular. Como ya comente antes, grabamos a prácticamente la totalidad de las bandas de música de la Comunidad Valenciana y todos los años grabábamos el Certamen Musical de Bandas, debajo: L.P. del Certamen del año 1979.


Este álbum triple se grabó por toda España, islas Baleares incluidas, premiado por el Ministerio de Cultura. Viaje lleno de anécdotas, de la que resalto una aquí debajo y durante el cual y estando en Málaga nació mi hija Nora y tuvimos que regresar rápidamente, estuvimos toda la noche en la furgoneta, a recordar que las carreteras eran otras.




Otro viaje del que guardo un gran recuerdo, tanto por el acogimiento que recibimos, como por la música y la comida, fue el tercer festival internacional del mundo Celta de Ortigueira.




Siguieron muchísimos más ...



Nota: El fin de este blog, que solo tendrá una única entrada, aunque la iré ampliando según vaya encontrando más cosas de interés, es el de llenar un vacío en el enorme mundo de internet, le preguntas a Google por estos estudios, Tabalet y Pertegás, y apenas hay nada y de lo poco que hay, artículos de prensa o entrevistas que no están muy ajustadas a la historia, así que nada como contarlo de primera mano.
Por lo que he visto por internet, parece que todos los estudios fueron los primeros y que algunos fundaron lo que no fundaron. 
Por dejar las cosas como fueron: el primer estudio en Valencia fue el Minus Uno, que como he comentado antes tenía el Sr. Calvo (el que nos hacía las cintas de casete) y que mas tarde se convertiría en Estudios de grabación Pertegás S.A. Cierto que no se le conocen grabaciones y que aquello parecía más bien otra cosa, pero había un equipo monoaural de lámparas que sería de los años 50, un cuarto de silencio y una sala de control.
El segundo estudio o el primer estudio multipista, como a mí me gusta decir, fue el que monte en mi casa, calle Río Genil 12 pta 10 de Valencia, tal y como pone en la tarjeta de visita que puse arriba. Poco después abrió Tabalet, en su día me plantearon que me uniera a ellos en lugar de abrir otro más grande, que sería el de Xirivella, conocía a Lluis Miquel  por haber sido técnico de sonido de su grupo y haberle hecho algunas maquetas, y siempre hubo muy buena relación tanto con el como con su socio, un catalán llamado Nacho y del que también guardo un buen recuerdo, pero yo tenía mis propios planes. Abrí el de Xirivella y ahí ya entraron como socios Fernando Romero Y Quique Morales.
La compañía discográfica Xirivella Récords también fue la primera discográfica en Valencia, todo ello  salvo error u omisión.


Tabalet no tenía equipo móvil, al menos al principio, y me contrataba a mí para hacerles grabaciones fuera de su estudio, prueba inequívoca de la magnífica relación que manteníamos. Más a más, el día que yo me marché de Pertegás, Tabalet compró parte de mis acciones de Xirivella Records.

Artículo de prensa en el que se habla de los dos estudios.


¿Qué fue de los estudios Pertegás?

Yo me marché en el 84, esta vez sí que me decidí por el barco, una depresión me dejo a medio gas por un par de años, mi cerebro reptiliano que es el que se encarga de mantenernos con vida, vio que de seguir así terminaría por petar y desconecto algunos sensores, entre ellos el del equilibrio, así que cada vez que trataba de ponerme en pie me daba un vértigo que me obligaba a sentarme, me lo tome en serio y di un giro radical a mi vida, hay quien no hace caso a estas señales, va al médico, y este le da un inhibidor que vuelve a activar los sensores que nuestro cerebro desconecto precisamente para protegernos y se termina con un infarto.
Aquello había crecido mucho, había que pagar nóminas, girar letras de cambio, pedir créditos, pagarlos, etc. Poco que ver con el amor puro y desinteresado por el sonido y la música. Por si fuera poco había tensiones entre los músicos y uno de los socios, yo era el accionista mayoritario y me venían a mi con las quejas, quejas justas que trataba de aplacar como mejor podía, de haber seguido yo en la empresa habríamos terminado por tener problemas entre los socios fundadores, pero yo ya no tenía ningún interés en permanecer allí y si un nuevo sueño que perseguir.
A mis dos socios, Fernando Romero y Quique Morales, les regalé las suficientes acciones para que mantuvieran el 51% en su poder y vendí el resto a músicos y otras personas que andaban por allí, conocidos que se pasaban a pasar el rato etc. Incluso Tabalet me compro una parte de Xirivella Records.
Cosas de la vida, los dos estudios (Pertegás y Tabalet) tuvieron el mismo final, embargados por deudas. Por lo que sé, y ahora NO hablo desde el conocimiento directo, Pertegás siguió creciendo, el comercial que trabajaba en Tabalet se ofreció a Pertegás con su cartera de clientes, bueno, más bien con la cartera de clientes de Tabalet, estos lo acogieron con los brazos abiertos, gran error (Roma no paga a traidores) mas adelante ambos comerciales, el de Tabalet y el de Pertegás se marcharon con el bagaje de ambos estudios y abrieron otro estudio. Las tensiones que ya existían, tal como comente antes,  entre algunos músicos y la empresa derivaron en que al menos otros dos músicos habituales más se marcharan y montaran otros dos estudios, supongo que todo eso más la caída de precios en el sector y la llegada del digital debió de dar el puntillazo final.
En cuanto a mí, me separé, bueno, mas bien mi mujer se marcho, yo cogí la guitarra una bolsa con ropa, otra con libros y casetes y me fui a vivir en mi velero, en un velero de diez metros no caben muchas cosas, pero la ilusión puede con todo, pocos años más tarde me construí un barco un poco más grande y cómodo https://velerosimbad.blogspot.com/p/cruceros.html
El dinero que saque de la venta de mis acciones lo emplee en pagar el barco, le di una parte a mi ex y estuve unos meses dedicándome a la contemplación y a recuperarme de mi depresión, el dinero se va rápido y había que pensar en algo que me produjera ingresos, al año ya había fundado la primera empresa de alquiler de yates en Valencia, esta vez solo, estábamos en 1984.


Pero mi historia con la música y el sonido no termino aquí,  alrededor de 1992, mi hermano me llamo y me dijo que iba a hacerse un estudio de grabación en su casa, que sí le echaba una mano. No hay fotos de ese estudio, al contrario que ahora en que todo el mundo tiene millones de fotos en la nube y en el móvil, no era muy corriente andar haciendo fotos de todo. Pero para los amantes de la historia contaré una anécdota, en ese estudio se grabó en Valencia el primer disco con un ordenador, fue para el jugador del Valencia Lobo Diarte, que también cantaba, mi hermano no tenía mucha idea de ordenadores, pero tenía un genio de la incipiente informática a su lado, Miguel Ángel Mateu, ya fallecido, fue otro músico adelantado a su tiempo, además de buena persona y gran profesional: pianista, arreglista, director de orquesta etc. Trabajo mucho con nosotros en Pertegás. He "robado" esta imagen suya de un video de internet.


 Mi hermano tomó muy buena nota de lo que se podía hacer con un ordenador y no tardo nada en hacerse con uno.


Llegamos al año 2004 y mi hermano se muda de casa y claro está, hay que montar otro estudio, esta vez más grande y con un pequeño cuarto de silencio, de este sí hay alguna fotografía. Toda la estructura es flotante, nada toca con paredes, techo y suelo. Mi hermano toca la batería y podía hacerlo sin molestar a los vecinos, todo un logro.





Llegamos al año 2008. Yo nunca deje de tocar la guitarra, es más, como el trabajo de los barcos era de temporada, tenía los inviernos prácticamente libres y gracias a mi amigo Enrique Perona, que término de profesor de guitarra en el conservatorio, podía acudir a su clase como oyente. Yo ya andaba viendo los primeros videos que algunos guitarristas extranjeros colgaban en un naciente YouTube y me entró el gusanillo, así que le pedí consejo a mi hermano de donde podía comprar un equipo en condiciones y me recomendó Midimusic, ahí conocí a su propietario, Luis, un tipo "enrollado" que me aconsejo muy bien, desgraciadamente falleció no hace mucho y la tienda cerro. Acostumbrado a los precios en la náutica y el recuerdo que tenía  de lo que costaban los equipos de grabación en los 70, todo me parecía baratísimo.
Primero me instalé en la buhardilla donde tenía mi despacho, fotos de debajo:      




Luis me dio el teléfono de un profesor particular para que me enseñara el manejo del programa de grabación, un Cubase, lo único nuevo para mí, el resto ya vi que seguía siendo lo mismo, de hecho me compré los mismos micrófonos que tuve en la sala Gent y en mi estudio, la tecnologia en ese apartado no ha cambiado. Aunque vivo en un sitio muy tranquilo, para grabar necesitaba más silencio, así que me aislé una habitación la cual dedique solo al estudio.



Sonido ambiente de móvil.

De todas formas los años no han pasado en balde y los dedos ya algo artrósicos y machacados por mi trabajo me impidieron seguir grabando, el resultado no era de mi gusto y el primer crítico debe de ser uno mismo, lo poco que grabe hará ya más de cinco años sigue en mi canal de YouTube.


Escribiendo este blog ha habido momentos emocionantes, sobre todo cuando he encontrado a alguien del que no sabía nada desde aquellos años, también tristes recordando a los que ya no están y al revivir unos tiempos que siempre nos parecieron mejores y siempre nos parecerán mejores porque la perdida de la inocencia y de la juventud es lo que nos lleva a la melancolía. 

Enrique Pertegás, Valencia, a 12 de marzo del 2024.